ES EL MÁS EXPUESTO
«Salen de la trinchera, con esa valentía casi absurda que tienen los arqueros»
-Víctor Hugo Morales, extraído del relato de un partido*
Como se dijo en el otro libro, todo futbolista debe tener alta tolerancia a la frustración y reacción frente a la adversidad. El arquero más. ¿Por qué? Porque es el puesto más difícil que más tarde madura del deporte donde llegan sólo los elegidos.
«No la vi», dijo, con absoluta sinceridad, el arquero argentino Vargas de la Universidad de Chile, luego de que Aimar incrustara su tiro libre en el ángulo superior derecho (el 01.03.00). Lo que tendría que haber dicho también, es que sus compañeros no lo entendieron o no le dieron «pelota» cuando a los gritos él pedía más gente en la barrera que finalmente se conformó con 3 (sí, tres) hombres (igual casi a un suicidio), y una absoluta falta de prevención, estando enfrente Aimar, eximio pateador.
«El guardametas es un jugador aparte en el fútbol porque está autorizado a tocar la pelota con las manos» (Reglamento de Fútbol). Es llamativo y notorio como cada arquero (en los últimos tiempos) festeja efusivamente el gol de su equipo, en un idilio con el público y las cámaras.
¿Qué arquero no trasgrede y se adelanta en un penal?
EL ARQUERO COMO INICIADOR DEL ATAQUE O DEL CONTRA-ATAQUE
Esta faceta, en muchas oportunidades, no es valorada ni por los medios especializados, ni por el entrenador, ni por los compañeros y aún, en muchos casos, por el propio arquero. Se supone (y está bien que sea así) que la función verdadera del arquero es atajar los goles, evitarlos, defender la valla. Pero no es la única. En este sentido, puede ser además el primer delantero o asistente si tiene buena pegada (o rapidez de manos) y sobre todo si es rápido para pensar, leer la jugada y actuar en consecuencia. La estructura cognitiva del arquero que facilite un pensamiento veloz y se acompañe de una ejecución veloz, tiene mucha importancia como generadora de jugadas de ataque. Porque si el equipo, y en particular la defensa, lo acompañan, y el cumple una buena tarea, la misión cumplida es el cero en el propio arco y no perder… pero para ganar hay que atacar y hacer algún golcito en el arco de enfrente… y para eso hace falta decisión. ¿Qué delantero, aun marcado, no va a correr una asistencia veloz que pique en campo contrario, y que porta olor a gol ya que el equipo adversario quedó muy mal parado? Conjunción de lo técnico (aprisionar la pelota y tener buena pegada) y lo psicológico (decisión en ejecución, rapidez, concentración y confianza).
AMADEO CARRIZO
Estas son algunas enseñanzas que nos deja sobre el puesto Amadeo en su libro:
- «Conocer exactamente las dimensiones del campo, de las áreas y del arco, ayudará a tomar decisiones correctas.»
- «El arquero moderno tiene una participación determinante en las acciones ofensivas del equipo.»
- «Con esto les cuento que es el jugador que tiene mayor cantidad de funciones dentro del equipo.»
- «Para poder desempeñar con eficiencia estas tareas, tendrá que prepararse física y psíquicamente de una manera distinta al resto de los jugadores.»
- «El puesto lo hace vivir en soledad.»
- «Las virtudes psicológicas son: pensamiento analítico, atención, fuerza de voluntad y el porcentaje de confianza es indispensable.»
- «Cuando superamos el miedo al vuelo y a la caída, aprendemos a orientarnos en vuelos, giros y saltos.»
- «No gritaba nunca desde el arco, hablaba poco con mis defensores, lo suficiente.»
- «Hay que arriesgar el físico y atajar con todo el cuerpo.»
- «En los corners mi consigna era estar dispuesto para salir con seguridad y con la convicción de retener la pelota. La decisión en el arco, juega un factor fundamental.»
- «En el penal, cuando desconoces absolutamente al adversario, es todo azar. La mayor responsabilidad la tiene el shoteador, por eso se erran tantos. El lugar más difícil de atajar es rasante, fuerte y a un rincón.»
- «Siempre se recuerdan más los goles que te hicieron que los remates que atajaste. El puesto de arquero es ingrato por excelencia.»
- «Dos consejos: a) Vivir el partido intensamente. De esta forma se evitará verse sorprendido. b) Pude salvar pelotas de gol porque jamás confié en el defensor infalible.»
Las enormes enseñanzas de Amadeo escritas por el periodista Alfredo Di Salvo, y sintetizadas muy sucintamente, en función de lo desarrollado en el capítulo (respecto del perfil psicológico del arquero), las corono con una frase de Fernando Niembro, quien describe con precisión, «Amadeo logró convertirse en el primer conductor desde el arco, con sus salidas oportunas y sus saques perfectos. Cuando lo veo a Chilavert lo imagino a Carrizo, tal vez con otro rasgo de personalidad, pero con la misma eficacia.»
EL NIVEL INTELECTUAL DE LOS ARQUEROS
A los arqueros les pasan las mismas cosas que al resto de los futbolistas aunque se vistan diferente y jueguen con otras partes del cuerpo. Sin embargo, considero que el nivel intelectual de la mayoría de ellos, supera la media de los futbolistas. Basta ver la madurez de respuesta que tienen en los reportajes, cómo ven el fútbol, cómo piensan. Recuerdo a Sodero diciendo que escribía poesía y a Seré (ex-arquero uruguayo) con un libro en la mano, en un afiche por la educación. Bonano, Córdoba, Mondragón, Burgos, Cavallero son sólo algunos ejemplos que confirman mi hipótesis .
Tomando una carretera lateral por unos instantes en un reportaje realizado por Rodolfo Cedeira, de la revista «El Gráfico», Bonano se confiesa, «Luego de dormir poco esa noche, le dije a mi señora: "Prepará todo que hoy mismo nos volvemos a Rosario. No aguanto más esta situación. Iré a trabajar de cualquier cosa, pero la vida es una y hay que tratar de ser feliz y ahora no lo soy…" (era suplente de Burgos). Mi mujer me tranquilizó y me respondió que esta era una oportunidad única, y que la debíamos aprovechar porque tenía las condiciones para ser el arquero titular de River. Y realmente fue así. Sólo con el apoyo de ella llegué hasta aquí: titular y campeón con River, también tengo un lugar en la Selección Nacional y hoy María Robertina con sus tres años es el fruto de nuestro amor. ¿Cómo no voy a amar tanto a mi señora?»
Si bien nos desviamos un poquito del eje que quería señalar, el nivel intelectual puede llevar a pensar las cosas (mucho) para querer ser feliz, o bien razonar ante la firmeza y contención afectiva del familiar e intentar superar obstáculos.
En el libro «Zubizarreta: el número uno, José María Forte y Jorge Fernández nos dicen que a Andoní «le gusta analizar, reflexionar, meditar, discutir, sobre todo lo que ve, lee y oye […] no es sólo un portero de prestigio, sino una de las cabezas pensantes del fútbol español». Y agregan, «Zubi es un gran aficionado a la ópera y a la lectura. su actriz preferida es Katherin Hepburn y, de los actores, Gary Cooper.» Rememorando partidos, recuerda su primer gol en Primera, «Del partido tengo imágenes muy confusas. Me acuerdo, eso sí, del primer gol que encajé en la liga. Hugo Sánchez lanzó un corner, yo salí por la pelota, pero no llegué, y Ruiz, desde atrás, hizo el gol. Perdimos 2-0. El segundo lo marcó Marcos. La verdad es que jugué mal, muy nervioso, precipitado…». Gran capacidad de autocrítica. Pequeño gran secreto para madurar y crecer. Los autores señalan, «esta humildad, su afición, sus cualidades, su capacidad para razonar es lo que le ha llevado a lo más alto.» Vale recordar que en el Mundial del '90, el mítico Dino Zoff se declaraba ferviente admirador del juego de Zubizarreta, hasta el punto de considerarlo como el mejor portero del Mundial.
Como el referí, el arquero suele ser bueno cuando pasa inadvertido, cuando hace fácil lo difícil, cuando simplifica. Se repara en él cuando se equivoca y su error no es solamente suyo: «TODOS LOS DEMÁS PAGAN POR ÉL Y ÉL PAGA POR TODOS. HAY UNA VERDAD ESPANTOSA: los goles se los hacen al equipo, pero el vencido es el arquero» (Juan Sasturain).
[...]
Como se observa, entre las virtudes se destaca la Personalidad (o sus equivalentes «Temperamento» y «Carácter») y la precisión que tiene Chilavert al patear el balón, cuestión que no es fundamental para el puesto. Resulta curioso que algo que sí hace a la esencia del puesto (volar o tirarse) sea considerado un defecto en este encumbrado arquero. Se podría argumentar, como sugiere una de las virtudes mencionadas, que no necesita volar porque sabe pararse bien. El hecho de señalar su personalidad como virtud encuentra su contracara en que, justamente por su carácter, este jugador sea considerado como «agrandado» o que «habla mucho». Es importante que los jugadores puedan desidealizar a los supuestos ídolos y se den cuenta de que ellos también tienen defectos, cometen errores y que después de todo también son humanos.
Algunas consideraciones finales:
Como podrá observarse son muchos los elementos que se deslizan de esta investigación. Lo que básicamente vamos a puntualizar respecto del perfil psicológico del arquero, a partir de las opiniones vertidas por los jugadores, tiene que ver con que:
- El arquero no puede cometer errores. Un error en este puesto es igual a una gran pérdida, debido, entre otras cosas, a su gran exposición. El hecho de ser humano pasa a un segundo plano.
- El arquero siente, a raíz de todo esto, un alto nivel de autoexigencia y de auto-presión, aún cuando cuente con el apoyo de los compañeros y del entrenador. Es casi imposible que luego de un gol no lo asalte el pensamiento negativo «lo podría haber evitado» y su consecuente sentimiento de culpa.
- Existen condiciones psicológicas necesarias para responder al puesto que se desatacan claramente a lo largo de esta investigación. Se destacan: la personalidad, la responsabilidad, la fortaleza anímica, la «garra», la viveza, la concentración permanente, el apoyo a los compañeros.
- El arquero se sabe parte del equipo y perteneciente al mismo, pero son muchos los momentos de soledad que siente tanto en el entrenamiento como en la competencia.
- Se resalta la importancia del trabajo con especialistas, tanto con ex arqueros, que puedan transmitir los «secretos» del puesto, como con psicólogos deportólogos para potenciar la condiciones necesarias para rendir en tan difícil puesto.
- ¿Cuantas veces los gerentes, supervisores o Ceo¨s se sienten como el arquero , que sufre todo el partido, pero en los penales no tiene nada que perder? ¿Cuantas veces se generan equivocaciones en pelotas fáciles y se sacan «problemas» imposibles que se colaban del ángulo?
Lic. Marcelo Roffé